Corre el rumor por la Red de que Fedora es una distribución de las duras, que no admite todos los códecs de audio y vídeo, y además está considerada como el campo de pruebas de Red Hat. El artículo de hoy tiene que ver algo con lo mencionado, ya que va sobre Chapeau, una distribución basada en Fedora Workstation que busca subsanar los peros de la primera, buscando, además, la excelencia en lo que respecta a experiencia de usuario, rendimiento y estética.
Sobre Chapeau
Si seguimos las indicaciones de su propia web podemos decir que se trata de una distribución GNU Linux de alto rendimiento, que busca estar a la vanguardia. Utiliza el excelente escritorio Gnome.
A diferencia de su distribución padre, busca una relación más relajada con las licencias de software, y está pensada para ser útil tanto para los usuarios experimentados como para los principiantes. Por defecto tiene incorporadas las fuentes de terceros, algunos privativos, que por norma general en Fedora debemos habilitar a posteriori, como, por ejemplo, RPMFusion, DropBox, Steam, Adobe Flash y Oracle VirtualBox.
Además incluye paquetes básicos para garantizar la compatibilidad de nuevos paquetes, como algunos que aseguran la incorporación “sin dolor” de nuevos módulos del kernel, herramientas integradas de administración remota y virtual del sistema. Incluye una colección de herramientas de mantenimiento pensadas para usar la distribución en modo Live, para solventar problemas en una tercera distribución.
Actualmente la versión en producción es la 24, que coincide con su homónimo de Fedora y que salió el pasado mes de septiembre. Ya he comentado que utiliza el escritorio Gnome, en concreto la versión 3.20; además es compatible con las versiones de procesador de 64 bits, x86_64. La versión que utiliza de kernel es la 4.7.
En lo que respecta a programas incorpora la suite ofimática Libre Office 5, PlayOnLinux y Wine, para que así podamos utilizar programas pensados para la plataforma Microsoft Windows. Para los más jugones no podía faltar la plataforma de juegos Steam, que viene instalada por defecto. Incorpora el reproductor de vídeo VLC, y el navegador web Mozilla Firefox, con Adobe Flash incorporado. Esto sinceramente no lo veo como algo positivo, ya que tiende a estar en desuso. Además, gracias a los repositorios que he mencionado al principio del artículo, incorpora gran número de códecs de audio y vídeo, para que no tengamos ningún problema para escuchar a nuestro grupo favorito de música o ver el vídeo de turno de nuestros hijos en el festival del cole. También contiene un cliente Dropbox, aunque todo sea dicho, yo soy más de ownCloud.
En el apartado musical tenemos de lo bueno, lo mejor, ya que lleva una larga lista de software en este área, como Rhythmbox, Gnome Music y Sound Recorder, entre otros. En lo que respecta al vídeo ya hemos hablado de VLC, pero también trae consigo potentes editores como OpenShot y un reproductor de DVD.
En el campo de la imagen tenemos al popular GIMP, además de Darktable, Gnome Photos o Shotwell.
Respecto al tema de Gnome utiliza por defecto GTK Adwaita y, en los iconos, Moka, que no conocía y me ha sorprendido gratamente. Todo ello lo podemos modificar desde la herramienta “Retoques”.
En lo que respecta a la virtualización soporte KVM y XEN. Además viene ya instalado el popular software Oracle Virtual Box. Incluye Gnome Boxes que, al traducirlo, simplemente son «Cajas«…
Mi experiencia
Ya he dicho más de una vez que no me gusta hablar de temas de oídas, por lo que me he decidido a instalar el sistema operativo sobre un equipo Dual-Core con procesador AMD que tengo por casa. Al final del artículo listaré todos los detalles del equipo. Aprovechando la ocasión, ya que el equipo ya tiene diez años, he adquirido un disco sólido SSD de la marca SAMSUNG, concretamente el modelo V-NAND SSD 850 EVO. La he instalado fácilmente dentro de la caja del pc reutilizando la conexión SATA del DVD, que prácticamente nunca uso.
Para descargar la distro sólo debemos ir a su página web y descargar la ISO; desde allí nos indicará como proceder para «quemarla» en un DVD o en un USB. Si tenéis alguna duda al respecto ya sabéis, una patada a la timidez, y dejad vuestra duda en un comentario.
La instalación no tiene mucho misterio y es muy similar a la de otras distribuciones. La parte de la selección del escritorio nos la saltamos, ya que sólo tenemos GNOME. El resto es la selección de idioma, zona horaria, partición de disco, selección de contraseñas y creación de usuario no administrador. Una vez finalizada la instalación, al acceder por primera vez, veremos nuestro sistema:
El aspecto es muy pulido; destacan los iconos Moka. Sinceramente, ya estaba cansado de ver Numix por todas partes, así que se agradece el detalle. Además me gustan. Como navegador de carpetas utiliza Nautilus.
Por defecto podemos ver arriba a la derecha el icono de una taza de café, se trata de la extensión «Caffeine«, que nos permite, en un sólo clic, deshabilitar o habilitar el salva-pantallas y la suspensión del sistema.
Un apartado importante, que llevan consigo todos los escritorios Gnome, es el menú de configuración. Desde él podemos acceder a, prácticamente, todas las configuraciones del sistema: pantalla, impresora, idiomas, etcétera.
Experiencia con los programas
Antes de comenzar con esta parte, mencionar quizás el apartado más importante, esto es: el portal de aplicaciones «Software«, desde donde podemos instalar un sin fin de programas con un solo clic.
Ya sabéis que tengo varios pequeños seres por casa; uno de ellos me pidió jugar a ese juego de carreras en el que puedes controlar a un pingüino, ya sabéis, «SuperTuxKart«; la experiencia fue bien buena. Además, ya para mi propio interés, instalé otros programas y con ninguno de ellos tuve ningún problema.
Respecto a la experiencia con la suite ofimática LibreOffice, la única pega al respecto es que no viene el paquete de idioma Español instalado en ninguna de sus versiones por país. Para habilitarlo lo debemos instalar por consola, con el comando:
dnf install libreoffice-langpack-es
El resto de programas, como Gimp para la edición de imágenes; Gnome Music para la reproducción de audio; Firefox para la navegación web… todo correcto, y funcionando perfectamente. Quería también probar mi cámara web marca Logitech. Y pasa una cosa curiosa: cuando graba, en directo, va a trompicones la imagen; en cambio, si realizas una grabación y la ves después la imagen es fluida. Quizás son temas de drivers, aquí me queda investigar un poco al respecto.
Una aplicación interesante, a la vez que útil, es «Fedora Media Writer«, que nos ayudará a montar imágenes de distribuciones sobre dispositivos USB.
En el apartado de juegos he probado la plataforma Steam, de la que soy usuario, concretamente el juego Don’t Starve, y la experiencia es buena. No he llegado a la hora de vida, vamos, como viene siendo habitual 🙂
Conclusiones
Es una distribución que me ha sorprendido gratamente, tanto en la parte estética como en la relacionada con el rendimiento. Además, casi no he tenido que acceder a la consola de comandos, algo que agradecerán los usuarios más noveles. Quizás tendrían que cuidar más el aspecto del idioma en las aplicaciones, ya que muchas te aparecen en inglés aunque tú hayas indicado en la instalación que tu idioma es otro. Quitando esto, la nota es bastante positiva. Tener bajo el capó un motor Red Hat siempre es una garantía.
Las características de mi equipo son:
Procesador: AMD Athlon 64×2 Dual Core Processor 4000+ *2
Memoria: DDR2 8 GB
Disco sólido: Samsung V-NAND SSD 850 EVO 250 GB
Gráficos: Nvidia GeForce 8800
Pantalla: Philips Consumer Electronics Company 18»
Cámara: Logitech
Las imágenes del artículo han sido tomadas por mi y se pueden compartir libremente.
Muy cargada para mi gusto, pero si alivia el dolor de cabeza que te puede dar Fedora, me parece que es una buena opción.
El tema del idioma en las aplicaciones es común en Fedora. Aplicaciones tan comunes como Calligra u otras que ya vienen instaladas por defecto no respectan la configuración que seleccionamos. Para cambiar eso hay que abrir la aplicación «Idioma» y este nos pedirá seleccionar el idioma predeterminado para todo el sistema y ya estará resuelto -tardará un poco-. Esta acción no tiene nada que ver con «Idioma» en «Preferencias regionales» -al menos esto es así en Plasma-. En el tema de la instalación de codecs en lo personal me resultó algo incómodo en fedora -6 años en Debian crean un hábito que no puedes eludir fácilmente-. Muy buena revisión.
Saludos.
Muchas gracias por el análisis ( y por no caer en anglicismos a la mínima ) .
Había leído sobre esta distribución pero nunca me había animado demasiado; no obstante tras leer esta reseña creo que le daré una oportunidad en mi cola de virtual box en cuanto saquen Chapeau 25 .
¿ Has llegado a compararla ( de cabeza ) con Korora ? ¿ observas alguna diferencia entre ambas propuestas ?
Veo que no comentas el consumo de recursos, aunque tal y como está Gnome me imagino que nada más iniciarse tragará algo más de 1 Gb de memoria .
Gracias de nuevo
Reseña excelente. Chapeau tiene muy buena pinta. Sin embargo, visitando el sitio de la «distribución» (es una Fedora cargada con todo lo necesario para que recién instalada esté lista para usar sin dolores de cabeza), veo que es un proyecto de una sola persona, un chico francés que por la foto parece bastante joven. Me pregunto, más allá de lo logrado que esté Chapeau y de lo mucho que esté aprendiendo el chaval (olé por él y el curro que debe de llevar), ¿qué sentido tienen estos proyectos basados en una única persona?
Está muy buena la página, sigan así chicos.
hace tanto que tuve fedora en su versión 16 era una maravilla, nada que ver con ubuntu y su gnome tan mal trabajado lástima que no han cambiado de instalador los chicos de fedora