Despliegue de aplicaciones con Docker Compose
Seguimos hablando de containers, en este caso, de la herramienta Docker Compose, que nos permitirá definir y ejecutar múltiples aplicaciones utilizando contenedores de software.
Esta es, quizá, la zona que más abunda en Internet, la parte donde uno más aprende y más quiere aprender, al tiempo de que comienza a pensar en escribir lo que va aprendiendo. Es un momento mágico... ¡antesala de otro aún mejor!
Seguimos hablando de containers, en este caso, de la herramienta Docker Compose, que nos permitirá definir y ejecutar múltiples aplicaciones utilizando contenedores de software.
Para conocer el espacio que ocupa un archivo o carpeta hay muchos métodos. Tal vez uno de los más fáciles sea hacerlo a golpe de ratón en el explorador de archivos. Hay otras aplicaciones más específicas para tal fin como Filelight, Baobab o NCDU. De esta última aplicación pueden leer un excelente artículo publicado hace poco tiempo. Pero, como es habitual, estas no son las únicas opciones y, muchas veces, tampoco son las más prácticas.
Hoy les traigo dos comandos muy útiles que suelo utilizar para investigar rápidamente sobre esos archivos o carpetas que me están ocupando mucho espacio de mi preciado disco.
Ya lo sabemos, cuando utilizamos un servicio en Internet que es gratuito significa que el producto somos nosotros. Actualmente hay multitud de servicios en la llamada «nube» que nos ofrecen almacenamiento gratuito desde unos pocos gigabytes hasta decenas de ellos, según nuestras necesidades y las prestaciones del servicio. El problema es que, por norma general, son nubes opacas que suelen estar en otros países, de las que desconocemos sus normas de seguridad y, lo más preocupante, no sabemos qué hacen con nuestros datos.
Para solventar esto existen productos de almacenamiento libres que nos permiten acceder a su código fuente, que cumplen con cierta ética y que, además, nos podemos instalar en nuestros propios sistemas, véase VPS. Uno de ellos es Nextcloud.
Últimamente está muy de moda todo el género de los no muertos o los comúnmente llamados, por su término anglosajón, “zombies” (zombis en castellano), tanto en la literatura como en el cine. Diría incluso que se han metido de lleno en la llamada cultura pop. Hoy os explicaré cómo localizarlos y matarlos… Estoy hablando de procesos zombis en sistemas UNIX y GNU/Linux, ¿qué os pensabais?
Ya os expliqué hace poco la ventajas que tienen las plataformas tipo UNIX para saber en todo momento el estado del sistema. Pues bien, en el artículo de hoy vamos a avanzar un paso más. Vamos a analizar diferentes alternativas de monitorización de plataformas, ya sean GNU/Linux, UNIX u otras, incluso privativas. Pero antes de nada, ¿Qué es la monitorización?
Algunos personas, usuarias de sistemas operativos, ya sea por rapidez o practicidad, prefieren actualizar desde la consola. Otras descubren que la consola es rápida y práctica para muchísimas otras cosas como, por ejemplo, para formatear un disco.
En cualquier sistema operativo de escritorio, cuando conectamos un disco externo o unidad flash, el sistema nos alerta de que el dispositivo se ha conectado. Posteriormente, y si este se encuentra correctamente particionado y formateado, el sistema suele notificarnos que estas particiones y sus archivos están listos para ser utilizados.
Esto suele ocurrir en el 99% de las ocasiones…
¿Pero qué pasa cuando hay algún problema de formato en la unidad, o no está preparado de la manera adecuada? ¿Y si el disco funciona, pero lo que quiero es tirar, regalar o vender mi PC y lo mejor sería eliminar mis datos personales?