Como montar un NAS: El Hardware
No quisiera entrar en interminables discusiones acerca de cuál es el hardware óptimo para un servidor hogareño. Espero me disculpen si mi hardware de elección no es un HP microserver con procesador Xeon, o si está muy lejos de un Ryzen 7 2700 con «undervolting» o «underclocking». Tampoco es un PC antiguo en desuso como el que muchas personas pueden tener en algún rincón oscuro de la casa. Y cuidado, no se me malentienda, que ambas opciones son buenas, la primera con gran poder de procesamiento y buen consumo energético; la segunda para ir conociendo y entrando un poco en el tema de los servidores. Por supuesto, he experimentando un tiempo con las eternas Raspberry pi 2 y 3. Cumplen con su función pero no son lo rápidas que uno quisiera y además, uno se va a dormir con cierta intranquilidad, al dejar la pequeña mini-pc encendida toda la noche descargando ISOs o moviendo grandes archivos de un sitio a otro. Un aspecto un poco más objetivo, es el hecho de que su bus ethernet no llega a ser gigabit, por lo que muchos descartan estas placas solo por este motivo. Eso sí, como laboratorio de pruebas es excelente, pero no le pidan mucho más. Lo mismo se puede decir de la vieja PC que utilicé un tiempo para entender cómo funcionan algunos de los sistemas operativos más conocidos en el mundo de los NAS y servidores.